Danny se obstinaba en servir a los demás”, dijo su madre, Peggy Pino. “Desde su infancia, su sueño era servir a su país. Mientras que él no pudo hacer eso, él sirvió a la humanidad donando sus órganos. Estamos orgullosos de su legado”.

Danny dejó una beca de béisbol universitaria con la Academia de Marina Mercante de los Estados Unidos para unirse a la escuela de entrenamiento del ejército en la Universidad Internacional de Florida, y en última instancia recibió su uniforme de combate el 11 de septiembre de 2014. Sólo semanas después, Danny estaba visitando a amigos en Tallahassee cuando fue golpeado por un coche. A los 19 años de edad, Danny ya había tomado su decisión de convertirse en donante de órganos y se registró en el registro de donantes de órganos, tejidos y ojos de Florida.

La decisión de Danny salvó la vida de tres personas a través del trasplante.